Una manta para Navidad: La magia de los sábados

La magia de los sábados 

Ésta es la historia de las profesoras de Gimnasia Analía, Nati, Silvia, Pamela y Dani, profesor y DJ. Analía, mi profe de acua gym, me invitó a participar de una clase por Zoom el primer sábado de mayo. Como la conocía y tenía afecto por ella, acepté, pensando más bien en ayudar.

Pero la clase me gustó, y me fui anotando cada sábado. En junio me inscribí casi dándoles un voto de confianza a ellas que mantendrían el prefesionalismo y a mí misma, que sería medianamente disciplinada para asistir a otras las clases. Y así fue.



Analía armó un grupo de Whatsapp, solo conocía unas pocas mujeres de la pileta. Sin embargo, cada sábado, algo empezaba a crecer. Cuando terminaba la clase, surgían muchos mensajes de agradecimiento y felicitaciones, y algo de nuestros mundos se empezó a “colar” en ese espacio.

Eso y la música de la playlist de Dany, casi un bendito entre tantas mujeres, me fue enganchando… empecé a desear esa hora porque me desconectaba de lo que el virus estaba haciendo, porque sentía la energía de las profes, porque en esos días de bajón o que debía hacer tareas domésticas, escuchaba la playlist, y me sentía mejor. 

Al final, cuando hicimos un zoom para que me cuenten el basckstage de la Master, me enteré que la idea inicial fue unir lo que aman como profesión y lo que interesaba a la gente. Cómo se fue generando el trabajo en equipo, adaptando los ejercicios del agua al piso, buscando técnicas nuevas y siempre intentando ser creativas. 



Fue muy lindo ver cómo crecían, cómo el pase de pantallas de una profesora a otra se hacía con naturalidad, cómo respetaban los tiempos que iba distribuyendo Dany… Se notaba que evaluaban, pensaban, indagaban lo que nos gustaba a quienes participábamos. Recuerdo las clases para recibir la primavera, la de Halloween haciendo una receta, la de despedida del año, siempre renovando y sorprendiendo,

Me contaron que sus familias también se vieron involucradas porque la Master se instaló en sus casas cual rito y que empezaron a valorar porque podían ver lo que hacían y el impacto que tenía en las participantes. 

Elegí contarles esta historia porque es una historia de resiliencia entre mujeres. Cuando empecé no sabía que durante casi 10 meses, los sábados, iban a ser para mí, y para muchas mujeres más, un momento de encuentro con la música, el afecto, la alegría y ese toque de magia que sólo algunas son capaces de construir  en los momentos difíciles.

Me quedo con las palabras que eligieron para definir la Master:

Nati: Me gusta el ave fénix, y eso somos. Renace de sus cenizas, y sale mejor. A todo nivel, somos un equipo que nunca bajó los brazos.

Ana: Aprendizaje y amor. 

Silvia: La música porque me alegra y logramos en armonía, escuchar lo que nos gustaba a cada uno. 

Pame: Crecimiento juntos, en conjunto y ellos me ayudaron mucho.

Dani: Alegría, aprendizaje, práctica, amigas, experiencia a buscar algo diferente cada sábado, creatividad, sorpresa con los alumnos que nos siguen y agradecimiento.

Todo lo que dicen, yo lo sentí.

jackie

Buenos Aires, 18 de diciembre de 2020


Comentarios

  1. Excelencia amor dar sin esperar recibir son lo más un equipo lleno de imaginación de creatividad y mucho esfuerzo liderado por una persona excepcional Analia Pela

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