Día 508 | ¿De Cenicienta a mujer elástica?

 

                              Día 506 | ¿De Cenicienta a mujer elástica•?

En los últimos tiempos, en especial en Argentina, hemos visto proliferar movimientos y una infinidad de recursos que cuestionan, deconstruyen y visibilizan el rol tradicional de la mujer. Vos, seguramente tienes una postura. No pretendo que la cambies, sólo compartir algunos pensamientos en voz alta.

Leí un texto que dice “La mujer, además de trabajar, por lo general, tiene las obligaciones del hogar, de su familia. Y por ahí no tiene los tiempos para quedarse charlando de lo que pasó en el país…” y el texto continúa planteando que en definitiva cuando hay posibilidades de ascenso se lo dan al varón porque pudo entablar relaciones con su jefe que la mujer no logró por falta de tiempo. Hoy decimos que esta situación se debe al “techo de cristal” (“glass ceiling barrier”) expresión usada hace más de 40 años por Marilyn Loden para referir los sesgos que impiden el ascenso de las mujeres en el mundo del trabajo.

Sin embargo,  siempre he sentido que es una falsa disyunción la que se plantea  para las mujeres que decidimos que estar en el espacio público ejerciendo una profesión es importante. No se trata de familia o trabajo. Es una conjunción, pero una conjunción que se activa en su ejercicio, las mujeres podemos llevar una familia y ser buenas profesionales. Se dice que eso hoy no está en discusión, yo te digo ¿en serio? 

Para las más jóvenes tal vez el tránsito entre lo público y lo doméstico es más suave, pero no estoy segura. La pandemia puso patas para arriba la organización de la estructura familiar y no me quedan dudas que han sido las mujeres quienes han soportado la carga mayor. Además, durante el 2020 las mujeres se ocuparon de la escolarización de sus hijos e hijas y en muchos casos el aula  se instaló en el celular de la madre.  Y entonces ya no sólo fueron las habituales actividades extraescolares sino el desarrollo de nuevas rutinas lidiando con todas las dificultades emocionales de niños y adolescentes que se fueron sumando.

Muchas mujeres tienen una jornada laboral de 8 horas que se extendió y descompaginó en sus horarios, que comenzó a convivir en un mismo espacio con la vida doméstica que tiene un ritmo difícil de alterar pues al fin y al cabo, la mayoría de sus actividades giran en torno al mantenimiento de la vida. Y antes que contrargumentes te digo, ¿en serio? ¿Almuerzo y cena por delivery todos los días? ¿Robotito para la limpieza y lavandería para la ropa de toda la familia? Suena alucinante pero no es la realidad de la mayoría de las mujeres. Un apartado especial tiene acá quienes son personal de salud que además nunca se quedaron en casa y están siempre expuestas.

Torta de canela agendada

Lo señalado no cambia mi perspectiva, sino que la reafirma. Las mujeres como anfibias estamos en ambos mundos y en otros intersticios que tienen que ver con intereses subjetivos profundos. Pero ¿Cómo se valora ese doble rol? ¿Cómo se colabora en el sostenimiento de la vida?  ¿Es suficiente con el ocasional delivery o la lavandería express?

El reparto desigual de las tareas de cuidado se ha evidenciado brutalmente en la pandemia en la mayoría de los hogares y las excusas que lo sostenían también fueron desenmascaradas. A eso se suman los estudios estadísticos llevados adelante por la economía feminista. Es sin dudas, una distribución asimétrica de lo que denomino "el eterno retorno de lo mismo" o sencillamente el círculo sin fin.

Sin embargo, mi planteo va hacia la esfera más existencial. Si tuvieras un medidor mágico que tabule las horas de tu vida surfeando entre ambos mundos, y un timbrecito que marque las renuncias, no las fáciles sino las profundas, ¿qué harías? La vida es una flecha hacia adelante y lo vivido sólo es recuerdo o aprendizaje. Y esto vale para la vida individual como para la colectiva. Porque en última instancia no podemos escapar a los movimientos culturales. Y bienvenido el cambio que nos interpela para vivir mejor.

Y la pregunta sigue flotando. En tu casa, ¿cómo funcionan las manecillas para que el reloj siga girando con la precisión suficiente para que, renovada la vida salgas a participar del mundo público? ¿Cómo está la balanza del reparto? ¿Hacia dónde se inclina? Vale la pena pensarlo y dialogarlo, ¿no te parece? 

Te invito a responder y a leer mi próximo post donde seguiré indagando sobre estos temas, no es sexismo, no es género, es apenas, la vida de las mujeres.

jackie

Buenos Aires, 10 de agosto de 2021

• Mujer elástica es una expresión utilizada por Elena Arnedo en su libro (2000) Desbordadas: La agitada vida de la elastic woman. En el próximo post comentaré el por qué seleccioné este título.

Les dejo  algunas sugerencias para seguir pensando: 

La película Una sinfonía para Antonia o La directora de orquesta, basada en la historia de Antonia Brico, la primera mujer que logró dirigir una orquesta en la historia de la música. Se presentan los hechos más relevantes  en la historia de Antonia Brico, desde su dirección en la Orquesta Filarmónica de Berlín, hasta la creación de una orquesta para mujeres apoyada abanderada por la primera dama de los Estados Unidos, Eleanor Roosevelt. 

Una referencia bibliográfica de Antonia Brico

https://www.mujeresenlahistoria.com/2020/04/antonia-brico.html

Video de la campaña #los ayudadores  

https://www.youtube.com/watch?v=N4IWoGT0txU

Entrevista de Clarín a la directora general de la campaña "Los ayudadores"

https://www.clarin.com/familias/carga-mental-division-roles-ayudadores-hacen-cargo_0_HzJgX9dm_0.html