Día 974 | Cerrando etapas


Hemos generado un sinnúmero de metáforas para referirnos al cierre o cambio de etapas. Las filosofías orientales suelen usar el término “soltar” para simbolizar la actitud que ayuda a dar ese paso. Sin embargo, todo cambio lleva en sí mismo un dinamismo dual.

Desde ese lugar, dedico a mi hermana este artículo.

Luz entre la niebla (julio 2022)

Fue tu primer trabajo en relación de dependencia y para la burocracia, no cambiaste. Hasta tu último día, fuiste docente. Pero transcurrieron tantas horas de tu vida y casi como una paradoja a las formalidades, el ejercicio de tu profesión estuvo repleto de cambios.

En los 25 años nunca lograste ser titular, tal vez porque la vida se enamoró de tu vuelo y te dejó apenas de a ratitos en cada escuela como para que no te encariñaras o para que no te aburrieras de las mismas paredes, tizas o pizarrones. Tal vez porque tenías mucha energía, vocación y ganas y por eso quería llevarte cual picaflor por tantas escuelas... Por eso, siempre fuiste la seño Vicky del móvil, la que llegaba, como un bombero, a suplir a una docente dos días o a lo sumo, una semana. Tantos años de esas jornadas que empezaban sin un destino hasta que te asignaban una escuela y hacia allá ibas...Siempre en borrador, creando en el momento,  descubriendo cada vez nuevos niños y niñas...siempre por un ratito...

Pero un día, llegó el cargo de interina y hacia la escuela Marcos Sastre de La Frontera fuiste . Esa escuelita lejana, con sus familias vulnerables, fueron el lugar más fijo, que te mantuvo ocupada durante algunos años y donde debiste, como tantos docentes, reinventarte con la pandemia. Ahí viviste hermosos momentos y te convertiste en un "clásico" con tus actos de la bandera.

Ya se anuncia la primavera (julio 2022)

Y sí, inicia una nueva etapa. Y acá estoy, donde siempre nos encontramos, cerquita del corazón, para compartir la vida. Acá estoy para acompañarte a cerrar la puerta de esta etapa donde transcurrieron tantas horas de tu vida muchas de las cuales excedieron el marco del aula. 

Yo sí pude observar como la vocación te habitó más allá de las planificaciones, los cursos de perfeccionamiento, las jornadas de capacitación, los sinnúmero de actos escolares que preparaste, los obsequios que armabas para "tus niños" como te gustaba decirles. 

Sin dudas, la vocación es lo que hace que el rol se humanice para descubrir al otro. Y no dudo que vos estuviste ahí no sólo para alfabetizar o enseñar Matemática o Lengua. Vos cruzabas el umbral  del rol y encontrabas el corazón del niño en la tristeza de su pobreza, en la sencillez de sus alegrías, en los ojos brillando cuando valorabas sus pequeños logros, en las risas que suavizaban los errores para que pudieran seguir aprendiendo.

A la distancia, y desde el abrigo de la palabra, te acompaño en la certeza que hoy de la escuela te llevas una mochila llena de hermosos recuerdos y en especial, llena de hermosas amistades y mucho amor de esas familias, de tus colegas, de esos niños y niñas que compartieron tu paso por las aulas. 

Sí te doy mi mano para que cerremos, ¡no¡ mejor para que abramos la puerta a esos sueños que esperaban por falta de tiempo, al color de tus artesanías, a las horas de disfrute sin premura ni relojes, y en especial a los encuentros con los afectos sin calendarios... ¿Vamos?

jackie
Jueves 17 de noviembre de 2022








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